Acción
Fipronil, principio activo de Fipronil Labyes Perros ejerce su acción por su efecto antagonista del receptor del GABA (ácido gamma-aminobutírico) inhibiendo el flujo celular de los iones cloro (Cl-) y, por lo tanto, afectando el principal mecanismo neuromodulador de los artrópodos. Así, al ocasionar el aumento de la actividad eléctrica de la célula nerviosa, el Fipronil causa la muerte del parásito por hiperexcitación. Fue demostrado que el Fipronil, prácticamente no tiene afinidad por los canales de cloro de los vertebrados, lo que explica su alta seguridad en perros y gatos y para el hombre.
El Fipronil, cuando es aplicado en forma tópica, se distribuye rápidamente a través de la dermis, se almacena en las glándulas sebáceas y es liberado gradualmente posteriormente. Esta particularidad del Fipronil garantiza, independientemente de la formulación, su persistencia en altas concentraciones en la cobertura pilosa de los perros, garantizando su eficacia, aun cuando los animales sean mojados o bañados.
Los pelos de los animales tratados, al caer al ambiente, ejercen también un significativo control sobre las formas inmaduras. Al ejercer su efecto adulticida por contacto, el Fipronil posibilita que muchas pulgas mueran, aun antes de realizar su primera ingestión de sangre, una importante consideración para aquellos animales con dermatitis alérgica por picadura de pulga (DAPP).
Composición
Fipronil 10,0 g | Excipientes c.s.p. 100 mL
Indicaciones
Está indicado para el tratamiento, control y prevención de las ectoparasitosis de los perros, causadas por pulgas (Ctenocephalides felis, Ctenocephalides canis) y garrapatas (Rhiphicephalus sanguineus).Además de poseer un rápido efecto letal en las formas adultas de estos ectoparásitos, tiene un prolongado efecto residual, capaz de mantener a los perros libres de pulgas por 2 meses y de garrapatas hasta 27 días.
Puede considerarse un importante auxiliar en el control de las infestaciones por cestodes (Dipylidium caninum) que parasitan a perros y gatos, ya que las pulgas son huéspedes intermediarios de estos parásitos. Por otro lado la garrapata de los perros (Rhiphicephalus sanguineus) es responsable de la transmisión de la babesiosis y de la erlichiosis canina, causadas por la Babesia canis y Erlichia canisrespectivamente, siendo esencial el combate de la garrapata para el control de estas patologías.
